Ejercicio físico disminuye 10% el riesgo de apnea, revela estudio

Practicar deporte no sólo nos ayuda a lucir un mejor estado físico. Es bueno para nuestra salud mental, para el control del estrés, mejora el ritmo cardiaco, la flexibilidad y el estado de las articulaciones e incluso hasta nuestra piel nota los beneficios. Pero también nos ayuda a dormir mejor y esto en personas con apnea obstructiva del sueño es un plus a tener en cuenta.

• La práctica de ejercicio físico ayuda a que los pulmones y las fosas nasales estén en mejores condiciones.

El Estudio de Salud de Ontario, en Canadá, recopiló los datos médicos, de estilo de vida, sociodemográficos y de salud del sueño de más de 155.000 adultos y arrojó que la práctica de ejercicio físico ayuda a que los pulmones y las fosas nasales estén en mejores condiciones. Algo que es indispensable cara a dormir de una manera mucho más saludable.

• Con un mínimo de actividad física hay una reducción del 10% en el riesgo de desarrollar apnea del sueño.

En dicho estudio, con la actividad física de los participantes tuvieran éstos o no apnea del sueño -enfermedad que afecta al 5% de la población mundial- los resultados fueron sorprendentes: y es que con un mínimo de actividad física, es decir aunque sea caminar 30 minutos al día, hay una reducción del 10% en el riesgo de desarrollar apnea del sueño.

• Subir los minutos de caminata al día, fortalece también nuestra resistencia y nuestro sistema inmune.

En el estudio publicado en la Journal of Clinical Sleep Medicine, no sólo defiende que el simple hecho de caminar se asocia con un menor riesgo de apnea del sueño, sino que además incrementar los minutos que una persona camina al día ayuda a disuadir ese riesgo. Subir los minutos de caminata al día, fortalece también nuestra resistencia y nuestro sistema inmune.

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